Asistimos a una nueva era dónde los jóvenes adolescentes muestran una evidente predilección por las bebidas energéticas y estimulantes. No hace falta comprobar cuantos zagales compran estos brebajes y los pasean por los institutos o las calles. Las cifras hablan por sí solas:
-El productor Monster Beverage es la compañía con mayor rendimiento financiero actualmente, por delante de Apple o Amazon. Nada menos que ha experimentado una subida en bolsa con una cifra escalofriante: 60.000%.
Desde 2008, – año donde estalla la crisis en nuestro país procedente del crash de Lehmans Brothers y las subprimes – Monster ha seguido aumentando su volumen de ventas. Pero claro, el mundo por «mantener a los efebos activos » es competitivo y la compañía farmacéutica Vital Pharma no iba a perderse este nuevo nicho. Con la salida de Bang, su nueva bebida energizante pretende derrotar a la mítica Monster.
¿Quién ganará?
A lo mejor interesa más preguntarnos: ¿Quiénes perderán?
Atrás quedó la legendaria Cocacola con 32 mg de cafeína y 39 g de azúcar, si la comparamos con Monster, con 169 mg de cafeína (3 tacitas de coffee expresso) y 63 g de azúcar…
Supongo que las cantidades de cafeína y azúcar de Bang no quedarán muy rezagadas.
La cuestión son los efectos perjudiciales de la cafeína en niños y jóvenes, amén de la taurina y otros excitantes que conlleva la lata.
Parece que los adultos tenemos bastante claro que el café es nocivo para estas edades y sin embargo me preocupa el desconocimiento existente del contenido de tales bebidas y sus graves efectos perniciosos.
Los trastornos cardiovasculares, las taquicardias, el aumento de la presión sanguínea, el insomnio, la irritabilidad y los problemas gastrointestinales son de los peores efectos que estos elixires excitantes pueden ocasionar. Amén si se mezclan con las drogas legales (concerta, rubifén, equasym o elvanse).
Buffet libre para todos. Sírvase usted mismo.
